Superado el primer nivel del Día 1b

Arrancó el Día 1b del Main Event de las Christmas Poker Series 2018 con un montón de caras conocidas y con un ambiente bastante tranquilo.

Solo 27 jugadores disputaron la primera mano, pero en los siguientes minutos ese número ha crecido hasta las 45 entradas. De todas ellas, solo una corresponde a un re-entry, el que tuvo que hacer Francois Gamel tras enfrentarse en una mano contra David Murillo.

Murillo, que ayer salió de la póker room caliente como una estufa tras cometer el error de no enseñar sus dos cartas cuando tenía la mano ganadora, lo que hizo que el bote fuese a parar a su rival, ha comenzado hoy con fuerza y con ganas de olvidar aquello.

Él mismo abrió la acción desde primeras posiciones, y no dudó en pagar cuando Francois Gamel le hacía three-bet a 325. Por el medio, Rubén Hurinich también se unía a la fiesta y los tres iban a ver un board que mostraba en el flop. Murillo, que no tenía posición, salía apostando casi tres veces el bote, lo que no era suficiente para derribar al francés, pero sí a Hurinich, que se tiraba de .

El turn fue un y Murillo, lejos de echar el freno, decidía poner en juego el resto de su stack en otra overbet descomunal. El francés necesitó un tiempo para pensar, pero tras unos segundos miró el croupier y pregunto: "¿hay re-entry en este torneo?". En cuanto recibió respuesta afirmativa no tardaba ni un segundo en poner en juego sus fichas.

Murillo mostraba entonces para dobles, lo que era superior a los de Gamel, que todavía tenía algunos outs antes del river. Sin embargo, la última carta fue una blanca que no cambió nada y permitió a Murillo colocarse con 60.000 puntos después de las primeras manos.

En el resto de mesas encontramos a jugadores como Robert Escribano, Vicente Gargallo, el campeón de España de Poker Ramón Colillas, Robert Cazali, David Martín, Carlos Vallvé, o Harcharan Dogra Dogra, al que ayer el descanso de la cena le jugó una mala pasada.

"Ayer, cuando me preguntaste los puntos que tenía, todavía conseguí subir hasta los 90.000 y colocarme muy bien", nos decía justo al tomar asiento. "Después salimos al descanso de la cena, y cuando volvimos ya nada fue igual. Me dediqué a pagar y pagar y mis fichas se fueron perdiendo. Hoy espero que vaya mucho mejor".